hasta la luz de la lámpara
de la mesa de noche
cuando he cerrado el libro
que comienza a aburrirme
en la página noventa y dos
cuando he dejado de escribir
malos poemas que siempre
quedan a medio terminar
cuando he vaciado mi vejiga
antes de acostarme
para no antojarme
en plena madrugada
de levantarme a orinar
cuando he apagado el televisor
dejado de lado el celular
programado el despertador
para levantarme temprano
para volver a la rutina diaria
cuando me he olvidado
de las deudas con el banco
de las tarjetas de crédito
de llevar el auto a arreglar
cuando me he desconectado
de la necesaria internet
cerrado las redes sociales
dejado de chatear
de hacer comentarios graciosos
en las fotos de mis amigos
y de algunos enemigos por qué no
cuando he dejado la hipocresía
tanta inservible frivolidad
y cerrado mi vetusto portátil
hay algo que continua encendido
hasta un nuevo amanecer.
Mi corazón latiendo por vos.
