POEMA PARA OLVIDAR



Cinco de la mañana
silencio y oscuridad.

El sol se despereza al oriente del planeta
los pájaros cantan de felicidad
augurando un brillante día
el gallo los acompaña
a lo lejos con su ronca voz
componiendo así
la mejor banda sonora para mis oídos
que solo quieren escuchar
su suave voz.

Salgo a correr
el cielo está limpio
el aire está frio
intento olvidarla
pero su recuerdo me persigue
a toda velocidad pasa a mi lado
no muestra señales de cansancio.
Me pregunto si en su afán
hay un instante en que
también mi recuerdo
aparece lento
a espaldas suyas
si se ha dado cuenta
que intenta alcanzar
su memoria de cristal.

Regreso a casa
nada a cambiado
el mismo panorama
de rutina y aburrimiento.
Otro día nublado
en pleno verano.
Otro día triste
como el pájaro sin sus alas.  
Otro día sin su voz
ronroneándome.
Otro día sin su cuerpo
magullándome.
Otro día para olvidar
mientras la recuerdo.