EL ENGAÑO

La conoció en un bar
y en el hotel le arrancó la blusa provocativa,
la falda entallada,
los zapatos de tacón alto,
las medias de seda,
los ligueros,
las pulseras
y los collares,
el corsé,
el maquillaje,
y al quitarle los lentes negros
se quedó completamente solo.

MARCIAL FERNÁNDEZ